Susto en San Isidro: una avería deja suspendidos en el aire a 50 esquiadores en el telesilla de Riopinos
Lo que prometía ser una jornada perfecta de esquí en la estación invernal de San Isidro terminó con momentos de tensión para medio centenar de esquiadores. Una avería en el telesilla de Riopinos, que conecta el valle de Vegarada con el resto de la estación, dejó a los usuarios suspendidos en el aire durante cerca de una hora en la tarde del lunes 3 de febrero. El incidente se produjo en torno a las 15:00 horas, cuando el remonte se detuvo de manera repentina. En un primer intento, los operarios trataron de reactivar el sistema motriz principal sin éxito. Tras 15 minutos de intentos fallidos, se optó por activar el motor de emergencia, permitiendo evacuar a los esquiadores a una velocidad muy reducida. Según la Diputación de León, entidad gestora de la estación, el problema quedó finalmente resuelto a las 15:25 horas. Aunque la evacuación se llevó a cabo conforme al protocolo de seguridad, el incidente generó malestar entre los esquiadores, muchos de los cuales expresaron su frustración en redes sociales. La falta de información sobre posibles compensaciones por el tiempo de esquí perdido también fue motivo de quejas. La avería ha vuelto a poner sobre la mesa la necesidad de una modernización urgente de las infraestructuras de la estación. El telesilla de Riopinos, que data de los años 80, es solo uno de los muchos remontes que muestran signos de envejecimiento. La alta afluencia de esquiadores ese día, favorecida por las buenas condiciones meteorológicas y la ausencia de jornada lectiva en varias localidades asturianas, agravó el impacto del incidente. Este suceso se suma a la reciente avería de un telesilla en la estación de Astún, lo que ha reavivado el debate sobre la seguridad y el mantenimiento de los remontes en las estaciones de esquí. Expertos y aficionados coinciden en que es necesario un plan de inversión para modernizar San Isidro y garantizar su competitividad en el sector del turismo invernal. También se ha puesto sobre la mesa la posibilidad de un cambio en el modelo de gestión, actualmente en manos de la Diputación de León, apostando por una fórmula público-privada que permita mejorar el estado de las instalaciones. Pese al susto, todos los esquiadores fueron evacuados sin incidentes y pudieron regresar a casa sin daños. No obstante, la avería en el telesilla de Riopinos deja en evidencia la necesidad urgente de renovación en San Isidro para evitar que episodios como este se repitan en el futuro.